martes, 5 de febrero de 2013

LA EMPRESA NO ES TU FAMILIA



 Hoy estoy muy harto y quemado, se puede decir que estoy en el nivel rojo, ese en el que puedes estallar en cualquier momento. Vereis, un trabajador de mi empresa se va al terminar su periodo de 6 meses de contrato porque no quiere renovarlo, ¿Sus motivos? Es listo y no tiene necesidad de aguantar a un pelota como jefe y a un loco como jefe de este último, todo eso sumado al gran descontrol que hay montado por los cambios de humor del jefazo que tienen como consecuencia que hoy quiera A y el otro quiero B y ambas opciones te las justifica hasta la muerte sin criterio ninguno. El caso es que yo si tengo necesidad (un hijo y una mujer que ya no tiene ni paro) y me han ofrecido su puesto, digamos que es un cambio de puesto dentro de la empresa, en dicho puesto todo sea dicho se cobra más... o mas bien se cobraba porque a mi no me han dicho nada y ni siquiera han dado pie a que me lo plantee. Para aprender dicho puesto me tengo que ir fuera de casa unas 2 semanas a un Hotel, les digo que para no tener que volver ya que es un destino lejano y caro para ir en avión voy a llevar a mi mujer y a mi hijo solo el fin de semana, así la empresa ahorra dinero y yo no estoy 2 semanas sin ver a mi familia. Pues bien, me responden que mi familia no puede ir y que no puedo volver en dos semanas, es decir, no me vas a subir el sueldo, no me vas a pagar el sueldo de estar Sábado y Domingo fuera de casa, ni me los vas a dar como dias libres mas tarde y no me dejas que mi familia vaya al hotel.

Hoy me he sentido tratado como un perro, pero eso no es lo que mas me ha afectado, lo que mas me ha afectado es que intentas hacer el bien por la empresa y te dan patadas. He de decir que tampoco me ha pillado de sorpresa ya que en esta empresa el trabajador es visto como alguien que está en la empresa para robar el dinero de la nómina.

Lo único que me consuela, es que ya tienen fama en el mundillo y cuando la empresa desaparezca lo tendrán crudo para encontrar trabajo.

Hoy escribo desde el odio.

No hay comentarios: